Los Golden State Warriors tienen claro cuál es su gran objetivo para la temporada que viene: el anillo que LeBron James les arrebató en un séptimo partido que ya forma parte de la historia. La espina se ha quedado clavada en lo más profundo del corazón de los californianos, que ya se han puesto manos a la obra para intentar reconquistar la corona perdida.
Para ello, los Warriors quieren mantener la columna vertebral de un equipo que hizo historia la temporada pasada, agregando sólo lo necesario para volver a reinar. Piezas que en Oakland ya tienen nombre y apellido: Kevin Durant. El alero es la gran obsesión para los Lacob y harán todo lo que sea necesario para convencer al alero de Washington de que el proyecto de los Warriors es el idóneo para él.
Con el aumento de la masa salarial los californianos podrán retener a Curry, Thompson y Green y se podrán permitir hacer un 'all in' por Durant, al que intentarán convencer, además de con dinero, con un sistema ofensivo en el que tendrá plena libertad, compartiendo protagonismo con el actual MVP de la NBA.
Es en esa pelea de gallos donde los Warriors pueden encontrar un problema a la hora de fichar a un Durant que pasaría de ser la gran referencia en los Thunder a ser una opción más en la Bahía.
Por ello, conscientes de la dificultad de fichar a Durant, los Warriors ya manejan un 'plan B' que también tiene nombre y apellidos. Se trata de Pau Gasol. El español es la segunda opción para los californianos, que intentarán aumentar su presencia en la zona con un jugador de garantías, que sea capaz de aportar puntos y rebotes, liderando la segunda unidad del equipo.
Los Warriors se suman así a los Spurs, que ya han mostrado su interés por fichar al de Sant Boi, y a los Bulls, que tienen intención de hacer una oferta de renovación a uno de los grandes agentes libres del verano en la NBA.