La selección inglesa se impuso 2-0 fácil a Suiza, en un partido casi de trámite para los ‘pross’, que pudieron celebrar por todo lo alto la confirmación de un hecho que, tarde o temprano, se iba a producir: Wayne Rooney ya es el máximo goleador de la historia de Inglaterra en solitario.
El ariete del Manchester United anotó el segundo tanto del encuentro, con lo que suma ya 50, uno más que el mítico Bobby Charlton con el que empató en el anterior partido.
Rooney marcó de penalti, cometido sobre Sterling, en el minuto 82 de encuentro.