Los días de Iker Casillas en el Porto están contados. Su salida del club luso sería inminente y la decisión irrevocable.
Desde hace unas semanas, el guardameta español ya no cuenta para su entrenador, que prefiere al joven José Sá bajo los palos de la portería de los 'dragoes'.
Este cambio de rol ha hecho meditar muy mucho al ex madridista, que quiere disponer de minutos y no está dispuesto a aguantar en el banquillo lo que resta de temporada.
Iker solo aceptaría quedarse en el Porto si se le garantiza la titularidad, una posibilidad remota y que dibuja su salida en el mercado de invierno con un destino aún por conocer.
Todo indica que el Porto no le pondrá problemas y que le facilitará la marcha a un nuevo equipo, que ya le está buscando su representante. En las últimas semanas se especuló que el Newcastle de Benítez lo querría incorporar a sus filas.
Casillas, que sus primeras dos temporadas en el Porto jugó 32 y 33 partidos respectivamente, lleva tan solo ocho en esta temporada. El último de Liga fue el 1 de octubre, ante el Sporting, y en Copa, ante el Portminonense, el 17 de noviembre, encajando dos goles.
?♂️ ESGOTADO / SOLD OUT
— FC Porto (@FCPorto) 13 de diciembre de 2017
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