Tyson Fury renuncia a sus títulos

 

El campeón mundial del peso pesado, el británico Tyson Fury, confesaba recientemente que es maníaco depresivo y que en los últimos meses se ha refugiado "en la cocaína y el alcohol" para superar una profunda depresión.

 

Ahora, el boxeador quiere centrarse en su recuperación y antes de que sus títulos le sean arrebatados por incomparecencia a los combates donde se disputan, ha decidido renunciar a ellos. Así, sus títulos de campeón mundial de los pesos pesados de la WBO y WBA quedan vacantes: "Creo que es justo y recto por el bien del boxeo permitir que los otros contendientes luchen por los cinturones vacantes, que con orgullo he ganado", aseguraba el boxeador en un comunicado. "He ganado los títulos y creo que se deben perder en el ring, pero soy incapaz de defenderse en este momento y he tomado la decisión difícil y emocional de despojarme ahora oficialmente de mis preciados títulos mundiales", decía el deportista, que quiere centrarse "en el otro gran reto de mi vida, en el que, al igual que contra Klitschko, voy a vencer", adelantaba Tyson Fury, haciendo referencia a Wladimir Klitschko, al que le arrebató el título de campeón mundial.  Mick Hennessy, el promotor de Fury aseguró que ahora "lo que es de suma importancia es que reciba el tratamiento médico junto con el amor de su familia y amigos y el apoyo del mundo del boxeo para conseguir una recuperación completa".