Cris "Cyborg" no tuvo problemas para atropellar a Lina Lansberg el pasado 24 en el UFC Brasilia. Después de dos rounds de intenso dominio que culminaron en un nocaut técnico, la atleta vio su nombre involucrado en la polémica tras el lanzamiento de un vídeo que puso en duda si, de hecho, hizo el peso correcto para actuar en el octágono. Y para terminar el tema, la brasileña aseguró que siguió con todas las reglas.

Esto se debe a que, mientras las imágenes mostraban su peso en libras (141,4, es decir, 0,4 por encima del límite máximo estipulado), Cris, que usaba bikini, dijo que momentos antes se había subido a la báscula desnuda delante de la Comisión Atlética Brasileña de MMA (CABMMA), y que allí dejó claro que estaba con las 141 solicitadas.

"En el vídeo aparece ese peso porque estaba con ropa. Tiré la ropa para pesarme y fueron las 141 libras. Hasta aparezco en el pesaje público hablando con el tipo de la Comisión que tenía que desnudarme, la ropa estaba mojada", dijo la atleta en una conversación exclusiva con AG Fight, quien recibió el respaldo de la organización para pesarse con el bikini.

Además del vídeo en sí, el momento sobre la balanza de la amazónica ya garantiza una atención especial debido a la famosa dificultad que tiene por perder el peso necesario para llegar a 63,5 kg. La campeona del peso pluma (66 kg) de Invicta FC también fue filmada discutiendo con su nutricionista George Lockhart días antes de la pelea.

La razón fue el uso de píldoras anticonceptivas que, a la vista del entrenador, ayudarían en el proceso de pérdida de peso. Sin embargo, "Cyborg" dejó claro que el efecto fue contrario y que su cuerpo retiene más líquido de lo esperado, lo que hizo aún más agotador la semana anterior al duelo.