El delantero hispano-brasileño del Chelsea, Diego Costa, fue expulsado este sábado en la derrota 2-0 del Chelsea ante el Everton en los cuartos de final de la Copa de Inglaterra, tras intentar morder a Gareth Barry, con el que se había encarado en varios lances del partido.
Tras irse al suelo por una falta del centrocampista del Everton en el minuto 84, Costa se levantó y pegó su cabeza a la de Barry, antes de acercar la boca al cuello de su rival y hacer el gesto de morderle. Luego le dijo algunas palabras al oído y acabaron abrazados.
El árbitro le señaló la segunda tarjeta amarilla. Tres minutos después Barry fue también expulsado al ver la segunda amonestación por una entrada al español Cesc Fábregas.
“No vi el incidente de Diego Costa, si lo hubiera visto, haría el comentario adecuado, pero es difícil sin verlo. Fue un partido duro, ellos iban un poco tras él (Costa). El árbitro no debe proteger, pero sí saber cuando van a por alguien”, señaló el técnico holandés del Chelsea Guus Hiddink.
“No puedo comentar si Diego Costa hizo algo. Fue un partido lleno de emociones, el árbitro completó un muy buen partido”, añadió el entrenador local, el español Roberto Martínez.
El gesto de Costa recordó a las acciones del uruguayo Luis Suárez, que ha mordido a tres rivales a lo largo de su carrera. La última vez fue en la espalda del italiano Giorgio Chiellini, durante el Mundial de Brasil 2014.
Entonces el árbitro no vio su agresión, pero fue sancionado a posteriori por la FIFA con cuatro meses de suspensión de partidos oficiales.
Tras el Mundial Suárez fichó por el Barcelona y en sus primeros meses visitó a profesionales para intentar poner fin a estos ataques de cólera.