Los colombianos Cristian Higuita y Carlos Rivas que impulsa al Orlando City

 

Una de las primeras cosas que hizo Orlando City SC una vez que aseguró su ingreso a la MLS, fue concentrarse en la búsqueda de talento joven, especialmente para aprovechar la veteranía y la influencia que tendría en el grupo su primera gran contratación: Kaká. Por ello, no tardó en anunciar fichajes de talentos con gran futuro.

Y si por allá a finales de 2014 alguien preguntaba en Colombia por futbolistas de corta edad, pero con rodaje y buenas perspectivas para su carrera, seguramente los nombres de Cristian Higuita y Carlos Rivas iban a salir a relucir en ese listado.

Ambos estaban destacando en el Deportivo Cali. Rivas anotó 12 goles en 29 juegos con el conjunto verde, mientras que Higuita sólo participó en 10 desafíos, pero venía de coronarse campeón sub20 con la selección Colombia en el Sudamericano de la categoría, clasificatorio al Mundial Juvenil de FIFA.

La posibilidad de que ambos llegaran juntos al naciente club de la MLS, motivó la decisión de emigrar y probar suerte en la principal liga estadounidense, con un conjunto que presentaba un plan ambicioso de crecimiento.

“Cuando supe que Carlos iba al Orlando City, se me facilitaron las cosas para tomar la decisión”, confiesa Higuita, quien nunca ha ocultado que la presencia de un gran amigo, ayudaría el trance de llegar a un país con un idioma y costumbres diferentes.

“Carlos es como un hermano menor, siempre nos apoyamos, le estoy dando consejos, ha sido muy gratificante poder compartir aquí con él”, señala el mediocampista, quien se ha convertido en pieza clave de los Leones Púrpuras.

De los dos, es Higuita el que ha sido más regular, aunque este 2017 ha comenzado de la mejor forma para Rivas, quien a pesar de no anotar goles, ha sido reconocido como el socio ideal de Cyle Larin, quien en gran parte con el apoyo del colombiano, resalta como el goleador del club con sus seis tantos hasta ahora.

“Me siento muy bien, trabajando fuerte todas las semanas para mejorar y sobre todo, para que al equipo le vaya bien”, dice Rivas tras el entrenamiento, al que suele acompañarlo su pequeño hijo Dylan de sólo ocho meses de nacido.

 Sobre Cristian, se deshace en elogios. “Más que un amigo, una persona que me escucha, que me aconseja y que ha sido importante aquí en mi llegada a este país”, dijo.

El día en que Orlando derrotó al LA Galaxy 2-1 con un gol de Larin sobre la hora, los aficionados por largo rato corearon un apellido. “Rivas, Rivas, Rivas”, se escuchaba de lado a lado del Orlando City Stadium. Consultado sobre esto, el delantero dijo que es algo inédito. “Nunca me había pasado. Es muy lindo que la gente te reconozca y escuchar tu nombre así”, exclamó.

 

El tercer año para Higuita y Rivas en Orlando parece ser el de la consolidación, aquello que tanto soñaron en Cali. Ambos han sido titulares habituales y se han ganado el cariño del público. Y, del otro lado, el club púrpura disfruta al ver cómo esos talentos por los que tanto apostó, ya comienzan a rendir sus frutos.