El futbolista holandés, Arjen Robben, ha confirmado que a sus 35 años pone punto y final a su extendida y gloriosa carrera futbolística.
El de Bedum terminó su contrato con el Bayern de Múnich, donde estuvo las últimas 10 temporadas y finalmente ha decidido no seguir jugando.
El habilidoso extremo comenzó su carrera Groningen holandés desde donde dio el salto al PSV. En las dos temporadas que permaneció en el coloso holandés consiguió ganar una Eridivisie y demostrar que Holanda se le quedaba pequeña.
En el verano de 2004 desembarcó en Londres aunque tuvo que esperar hasta noviembre para debutar con el Chelsea por culpa de una lesión, maldición esta que le acompañaría a lo largo de su carrera.
Ese mismo año, en un control rutinario se le descubrió un tumor en el testículo. "Tenía mucho miedo. Vivir sin que el fútbol fuera lo más importante fue algo difícil. La espera fue terrible. No sabía qué iba a pasarme”, comentó a posteriori Arjen. Por suerte, a finales de año informó que había vencido a la enfermedad.
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— Arjen Robben (@ArjenRobben) 14 de octubre de 2016
