El Chelsea respira, y más todavía Mourinho. El campeón de la Premier League, que roza los puestos de descenso en el campeonato inglés, sigue dependiendo de sí mismo para estar en los octavos de final de la Champions League. Durante unos minutos, fue el Dinamo de Kiev quien ocupó la segunda plaza del grupo, con el Oporto por delante. Sin embargo, un libre directo ejecutado por Willian volvió a poner a su equipo por delante.
Los ingleses salieron bien al partido, aunque tardaron en adelantarse. Cuando sucedió, no fue sólo por méritos propios sino gracias a un autogol de Dragovic, que envió el balón a su portería al tratar de despejar un centro desde la derecha. El defensa austriaco se redimió en la segunda parte en el área rival, al aprovechar una pésima salida de Begovic en un saque de esquina. Su remate acabó en la red tras rozar en un compañero. Sin embargo, la alegría duró apenas cinco minutos, lo que tardó Willian en ajustar su tiro por encima de la barrera.