Se veía venir que tarde o temprano Marcelo ingresaría en la enfermería del Real Madrid. También lo sabía Rafa Benítez. Con la salida de Fabio Coentrao, quedaba algo cojo ese costado ya que el club había intentado -sin éxito- la contratación de varios futbolistas. Tiró las redes sobre Wendell (Bayer Levekusen) y Ricardo Rodríguez (Wolfsburgo) pero no llegó a ningún tipo de acuerdo.
Descartado el plan A, en el Madrid pensaron que para situaciones puntuales el entrenador podría tirar de Danilo, Carvajal, Arbeloa o Nacho. Todos son diestros, aunque Arbeloa se defiende con la pierna izquierda. Ahora, Marcelo se ha lesionado y el contratiempo se ha convertido en problema porque tanto Arbeloa como Carvajal están lesionados y Danilo tiene que ocupar su costado natural.
A falta del resultado de las pruebas a que será sometido Marcelo, de momento, el lateral es baja para el encuentro ante el Sevilla en el Pizjuán este fin de semana. ¿Quién será el lateral? Todo apunta a que, si no se recuperan los actualmente lesionados, Nacho tiene todas las papeletas. Está rindiendo a buen nivel y sería lo más lógico. La otra opción sería retrasar a Cheryshev, pero hacerlo en estas condiciones y en ese campo se antoja imposible.
También Benítez ha traicionado a su propia filosofía de administrar esfuerzos en su plantilla. Públicamente ha argumentado que hay un control exhaustivo sobre el gasto de sus jugadores, siempre pensando en evitar la lesión. El entrenador ha tenido partidos para darle descanso pero no lo ha hecho y ahora ha pagado la acumulación de esfuerzos.
