Un grupo sin ningún firme candidato a hacerse con la ‘orejona’ y quizá descompensado con el resto de grupos en cuanto a calidad de los equipos. Pero, por esta última razón, será un grupo mucho más reñido, igualado y en el que las apuestas estarán más abiertas.
Los favoritos son Benfica, actual campeón de la liga portuguesa o el Nápoles, equipo fuerte pero que tendrá que rehacerse tras la salida de Higuaín. Los italianos pueden sentirse afortunados, ya que podrían haber caído en el mismo grupo que el Barça, lo que le habría complicado el pase de la fase de grupos.
No obstante, ni Benfica ni Nápoles han de confiarse. Las plazas de ucranianas y turcas del Dynamo de Kiev y el Besiktas son calientes, nunca un camino de rosas.
