Recientemente circuló en las redes sociales un video de un compatriota radicado en Estados Unidos, el cual explica muy elocuentemente como es la vida en aquel país y todos los gastos en que se incurre, exponiendo que el llamado "sueño americano" es solo eso, un sueño. 

¿Porque los Hondureños no podemos soñar en nuestra propia tierra? ¿Porque estamos condenados al destierro? Emigrar a otra nación, de manera legal o ilegal para buscar una vida mejor, oportunidades de empleo y de progreso, es una cruz con la que la que parece que estamos obligados a cargar, una cruz que nos pusimos nosotros mismos y que no hacemos nada por soltar.

El fútbol no queda de lado en esta historia, al contrarío, es parte central de ella. La gran mayoría de futbolistas cuya carrera ha llegado a su fin terminan su vida en tierras del tío sam, lejos de su familia, añorando volver algún día a su patria, extrañando la comida, costumbres y lugares, viendo como la vida transcurre y se agota día a día. Contrario a lo que puedan pensar muchos, la carrera de futbolista es complicada y suele contrastarse con la falta de madurez y educación de la persona que la ejerce, la mayor parte de los equipos de la liga nacional pagan a sus empleados salarios pírricos y aun así pasan grandes apuros para cumplir con la planilla a fin de cada mes y solventar todos los gastos en los que se incurre al tener un equipo afiliado al máximo circuito. 

Muchos jugadores desde temprana edad buscan enrolarse en los equipos grandes de la liga, los que radican en las principales ciudades del país. Tegucigalpa y San Pedro Sula son los destinos predilectos y mas llamativos, sobretodo por la solvencia económica y estructural de sus clubes. Esto no significa que los elementos que vienen a probar suerte sean tratados de la mejor forma o vivan en las mejores condiciones. Olimpia el equipo mas grande y poderoso de Honduras ha dado muestra de ello, varios de sus futbolistas que llegaron jóvenes al Club y que ahora son figuras, han relatado las condiciones inhumanas en las que vivieron en la sede del conjunto blanco y el mal trato que recibieron por parte de algunos directivos. Aunado a esto, para figurar, muchos tuvieron que abrirse camino siendo prestados a otro equipo en el pudieran tener minutos para consolidarse y luego volver. Estar en Olimpia, Motagua, Real España o Marathon no es sinónimo de riqueza, los jugadores deben pagar un peaje, dejar su casa, pasar precariedades para ganarse un puesto y recién ahí empezar a percibir un salario que lo lleve a una vida digna. 

El fútbol es una profesión como cualquier otra, con la diferencia que no se puede ejercer toda la vida, a lo sumo y con suerte, considerando que un jugador debute a los 18 años (algo que se da muy poco) y se retire a los 35, habrá completado 17 años de carrera como profesional(esto sin contar con el riesgo del retiro por lesiones), en los cuales percibe un salario de acuerdo a su valía e importancia para el equipo. Los que viven de ello, los protagonistas de la pelota deberían pensar en esto y protegerse, vislumbrar que será de sus vidas cuando las piernas no le den mas. Muchos futbolistas en algún momento de su carrera comienzan a amasar grandes cantidades de dinero pero su falta de madurez y educación no le permiten administrar de mejor forma sus activos y terminan despilfarrando mucho de ello. La mayor parte de culpa de esto la tiene el jugador pero también el desinterés de los equipos en encaminar de buena manera a sus empleados, sin verlos solo como una mercancía. Debería ser una premisa de los clubes y la liga, ofrecer al futbolista la oportunidad de formarse como profesional y como persona, darle facilidades para el estudio de una carrera universitaria y asesorarlos mediante expertos que los aconsejen como invertir mejor su dinero. 

La pregunta es ¿porque el futbolista no se une? ¿Porque tanto desinterés en el compañero de profesión? Si son conscientes y saben la manera en que son tratados, lo que cuesta llegar a ser alguien en el fútbol, ganar algo de dinero y la forma en la que terminan sus carreras y mas importante aun, sus vidas ¿porque no se protegen? Por protección me refiero a formar un tipo de institución, un fondo de pensión o algo parecido que los cuide y los sustente, una institución que facilite su vida durante su carrera y después de ella, que les de oportunidades de préstamo, algo que les permita permanecer en su país y disfrutar con sus familias cuando su vida futbolística haya llegado a su fin. 

La tónica no parece que vaya a cambiar, el futuro sigue viéndose gris, los años pasan y la vida de obrero lejos de tu país y los tuyos te espera...¡Futbolista despierta!