El fichaje del argentino, que podría ser el más elevado de la historia del campeonato italiano, reforzaría el sector ofensivo del gran dominador del fútbol italiano, que ya cuenta con su compatriota Paulo Dybala, el croata Mario Mandzukic y el bosnio Miralem Pjanic, que llegó a Turín para la próxima temporada por 32 millones de euros.