El Tribunal de Arbitraje Superior (TAS) dio una de cal y una de arena a Michel Platini. El presidente de la UEFA había presentado un recurso por la suspensión de su cargo durante 90 días tras conocerse un “pago desleal” de 1,8 millones de euros por parte de la FIFA por unos trabajos realizados una década antes. El directivo francés reclamó ante el TAS, que si bien confirmó su culpabilidad en ese cobro, estableció que el Comité de Ética de la FIFA no pueda prorrogar su castigo más allá del actual. Hay que recordar que este organismo quiso inhabilitar de por vida a Platini.